MONTE DE LA PENA. Alba García.

NARRADOR: Teresa era una preciosa doncella que vivía aquí, en Moaña. Era rubia, de ojos azules y poseía unos rasos delicados y firmes. Era de origen francés, pero su padre quería conocer nuevos reinos por lo que vinieron los dos a vivir al Monte de la Pena. Teresa era muy feliz en este lugar, y cada domingo bajaba a la romería a bailar. Sí, era algo que le apasionaba. También me contó que su madre había fallecido por una extraña enfermedad de la zona, y que desde esas, su padre se comportaba un poco extraño, ya que solía quedarse todas las tardes en su habitación observando un antiguo libro. Como Teresa siempre estaba sola, se pasaba los días en el prado paseando por el río mientras jugaba con los animales que la rodeaban.

TERESA: (Paseando por el río oye un extraño ruido).

MUJER: (Saliendo de la maleza del bosque) ¿Tú no serás la doncella Teresa?

TERESA: (Tiritando) Pues sí... ¿Como sabes mi nombre?

MUJER: (Con voz tenebrosa) Verás...Es que yo te estaba buscando...

TERESA: ¿¡ A mi !?

MUJER: Sí, a ti. (Saca de su bolsillos unos brillantes polbos y se los echa encima a Teresa y esta, poco a poco empieza e encoger)

TERESA: ¿¡ Que me has hecho!? ¡¿ Por qué soy tan pequeña?!

MUJER: (Entre carcajadas) ¡Lo tenías más que merecido!

TERESA: Pe-pe-pero... ¿que soy?

MUJER: Nada...Simplemente te combertí en serpiente.

TERESA: ¿Por qué lo has hecho?

MUJER: Pues, porque si yo no soy feliz, nadie es feliz en Moaña. Así que como a ti te vi tan contenta por el prado... No me quedo otro remedio. ( hechiza a Teresa para que no pudiera hablar en el estado de serpiente)

TERESA: Como soy tan honesta, te propongo un trato. Cuando alguien te de un beso, volverás a tu estado normal, pero si al vover a ser humana le cuentas a alguien quién y como te transformaron en serpiente te perseguiré hasta matarte. Nos vemos. (Se va por el bosque).

NARRADOR: Teresa iba todos los días al pueblo a ver si conseguía que algún vecinoo le diese un beso, pero nada más verla, todos huían de temor.

TERESA: (Se sienta en una roca y se pone a llorar)

NIÑO: ( Está recogiendo leña, ve a Teresa y se acerca a ella)

NIÑO: ¿Te encuentras bien? Pareces triste... (Le da un beso para calmarla y Teresa se transforma en humana)

TERESA: ¡ Muchisimas gracias !

NIÑO: Denada...Supongo...

TERESA: Bueno, no me presenté. Soy la doncella Teresa.

NIÑO: ¿Puedo hacerte una pregunta?

TERESA: Claro.

NIÑO: ¿Por qué eras una serpiente y ahora eres una humana?

TERESA: Verás...Es una larga historia que no puedo contarte, ¿sabes?

NIÑO: Pero... por qué? Te acabo de volver humana, creo que merezco saberlo...

TERESA: Era todo un hechizo de una malvada bruja.

NIÑO: ¿Sabes que? Eres la chica más valiente que conozco.

TERESA: Muchisimas gracias. Pero...Ahora que lo recuerdo aún no me dijiste tu nombre...

NIÑO: Jorge, mi nombre es Jorge.

TERESA: Que bonito nombre. Es el que siempre me gustó para mi futuro hijo. (Sonrió) . Bueno, ahora tengo que huír antes de que la mujer que me convirtió en serpiente se entere de que te conté todo. ¡ Nos vemos Jorge! (Se aleja).

NARRADOR: Esa fue la última vez que supe algo de Teresa. Hace 36 años. Espero que aún se acuerde de mi como yo me acuerdo de ella, de hecho, tengo más que claro que nunca la olvidaré. . Todavía tengo la esperanza de rencontrarnos algún día. Su amigo Jorge.