Hace mucho tiempo más o menos por el siglo 18, los aldeanos vivían tranquilos y la vida era buena. En la zona norte de la península ibérica Había un pueblo tranquilo que se llamaba moaña no era muy grande ni tenía las mejores montañas y ríos. Pero tenía el mejor pescado.
. Un día un comerciante llegó a la ciudad. Era un mouro y si algo de lo que decía era cierto había explorado el mundo buscando los objetos más raros y extraños. todos nos quedamos mirándolo con asombro cuando alguien saltó y dijo:
-¿ y cómo podemos saberlo?- dijo un campesino que no creía ni media palabra de lo que decía.
Y el mouro respondió
-solo tienes que acércate amigo mío, toma una muestra gratis de esta planta que e traído del nuevo mundo. Se llama tabaco y ayuda a curar la peste.-
El aldeano empezó a masticarlo y después de un rato los escupió y dijo.
-Santa Maria y Jose es el mejor sabor que é probado. ¿tienes más?-
-Si y como me has caido bien te hare una oferta.- respondió el mouro
El dia paso con tranquilidad hasta que la mitad de las existencias se terminaron. Después la hija del mouro salió de una tienda de campaña que habían montado y le dijo a su padre
-Padre puedo ir a explorar las llanuras del poblado para pasar el rato-
-Claro hija pero recuerda volver antes de que las tinieblas nublen el cielo.- Respondió
-Seguro padre.-
La hija se fue alejando de su padre hasta perderse de vista entre las casas y árboles.
El padre siguió vendiendo cada vez objetos más extraños desde patas de cabra Hasta algo llamado patatas.
La hija fue explorando por la calle causando admiración y recelo por su belleza al verla pasar pasó un pozo y muchas casas. después de eso se encontró de frente con un bosque. Ella lo intentó atravesar para ver qué había detrás ya que la frondosidad de los árboles no dejaba ver nada después de un tiempo buscando por donde pasar encontró un camino de tierra que parecía atravesarlo entonces ella entró en el bosque, después de unos minutos caminando un Jabalí salió de entre los arbustos, ella salió corriendo del Jabalí hasta atravesar el bosque aunque el Jabalí no le perseguía. Pero ella no miró atrás. Cuando se calmó se dio cuenta que de estaba en la aldea pero en una parte que no había visto antes. Inmediatamente se puso a explorar. vio 3 casas pero antes de ver nada más se dio cuenta de que el sol estaba a punto de ocultarse. Así que se preparó para volver y cuando iba a empezar se dio cuenta de que no podía no tenía suficiente coraje para cruzar el bosque si el jabalí estaba por hay. Así que peto en la primera casa que encontró y salió un señor que parecía leñador y dijo.
-¿Que quieres? No compramos nada.-Dijo con voz ronca
-No puedo volver a mi casa señor hay un Jabalí bloqueando el paso.-Dijo angustiada
-Bueno y eso te da derecho a ir llamando a las puertas-Respondió enfadado
-Pero señor necesito volver si no mi padre se enfadara.-Suplicó ella
-espera. ¡Hijo baja aquí ahora mismo!- Dijo el padre
Momentos después un niño bajo por las escaleras tenía el pelo y los ojos castaños de una edad parecida a la de la chica. El padre le dijo que acompañara al otro lado del bosque a la chica.
- Vale pero tendrás que darnos algo a cambio por estos servicios, cuando sea de Madrugada mi hijo ira para que le pagues ¡aceptas!- Digo el padre
-va, va, vale.- Tartamudeó la chica
Así que ellos dos salieron en dirección al otro lado.Por el camino fueron hablando hasta hacerse amigos. Ella descubrió que el se llamaba Juan y que quería ser constructor de armas de asedio aunque su padre se oponía además de que nació el 23 de Junio. El descubrió que a ella le gustaban las rosas. Y justo antes de llegar el le pregunto.
-¿y no te gusta nada mas?-pregunto
- Bueno ¿me guardas un secreto?-dijo la chica
- Si, ¿El que?-respondió
-Me gusta la ciencia.-susurro
- ¡Que! ¿Eres una bruja? Si alguien se entera te quemarán.-Dijo el, Nervioso
-Pero se que nadie lo ara.- dijo
Y acto seguido le beso. Antes de que el chico pudiera decir nada la chica salió corriendo hacia el poblado que ya era visible entre los árboles.
Cuando la chica llegó a su casa su padre se puso furioso por la hora que era.
-¡Como se te ocurre llegar tan tarde!.-
La hija intentó explicárselo pero él se negaba a escuchar. Cuando terminaron de discutir todo quedó en un silencio incómodo,Y si ya era malo se iba a volver peor.
-¿Padre?.-dijo ella
El le echó una mirada amenazadora.
-Padre para volver tuve que contratar a una persona y mañana va a venir a cobrar. Necesitaria dinero para pagarle.- siguió diciendo
El se fue a un estante y cogio un peine echo de oro
-Te daré el dinero pero venderé tu peine.- Dijo el padre sonriendo
La chica se quedó pálida aunque no había mucha diferencia.
-Padre ese peine,¡No puedes venderlo! Es muy importante.-Dijo enfrentándose a el
- ¡Crees que tienes derecho a gritarme!.-Grito el
-¡Pero ese meine me lo dio mi ma…!-dijo ella
-¡Ella está muerta!- dijo
El silencio aquella vez no duró demasiado aunque pareció una eternidad. La hija entre lágrimas salió corriendo atravesando el bosque hasta llegar a un claro con una poza. Ella se sentó al lado y no hizo nada. Así estuvo diez minutos hasta que un ruido entre los arbustos la alertó. El ruido de fue hacer cando y de entre las sombras salió Juan. Los dos a la vez dijeron.
-!Qué haces aquí¡-gritaron sorprendidos
Vengo aquí a pasar el rato.¡Y tú qué haces aquí?-Dijo Juan
Ella no respondió.
-¿Por qué lloras?-dijo
-Me pelee con mi padre.-Intentó decir
-¿porque que paso?.-dijo
-Me a quitado un objeto muy preciado.-dijo
-¿quién?.-preguntó
-Mi padre.-respondió
-¿el qué?- preguntó el
- Un peine familiar que ha pasado de generación en generación.- dijo ella
El chico que al cabo de un rato comprendió la situación dijo.
-¿que vas a hacer?
ella no respondió,se quedaron callados durante un tiempo y luego ella se levantó y se fue a la tienda de campaña en la que vivía. Cuando llegó encontró a su padre dormido así que se tumbó y durmió.
Ala mañana siguiente se encontraba sola, parecía que su padre se había ido a seguir vendiendo. Cuando salió vio que ya era mediodía todo estaba normal su padre estaba vendiendo como siempre y los aldeanos mirando sus preciados objetos. Durante un dulce momento creyó que había sido solo un sueño hasta que vio su peine expuesto en la parte más alta del carruaje listo para ser vendido. No se podía creer que pasara de verdad, en ese momento se dio cuenta que su padre le había dado un uso a una máquina que un inventor le había dado. Llevaba más tiempo del que podía recordar, en su colección servía para crear una pintura igual a otra con poco esfuerzo. Pues la había usado para crear copias de lo que parecía una cosa que su padre le había enseñado con el nombre de sub-asta que es un trueque en el que la mejor oferta se queda el objeto. Claro que no podía estar clara porque no sabía leer. En ese momento empezó a pensar en todo lo malo que podría pasar hasta que una voz lo paro al decir:
-Yo doy una vaca.-
Antes de que pudiera pensar en que hacer la sub-asta empezó.
-yo un caballo.-
-yo tres vacas y un pollo.-
-yo una bola mágica que sirve para dar patadas,.-
Y de repente un misterioso encapuchado con gabardina de cuero dijo:
-¡Una casa!
El resto fue silencio.
El encapuchado cogio el peine y luego le dio las llaves al padre de la chica.
La chica salió corriendo en dirección a la poza en la que había estado la noche anterior. Luego se sento y empezo a llorar. Las lágrimas caían irregularmente en el agua creando olas que no llegaban a ninguna parte. Cuando en ese momento detrás de ella apareció Juan.
-Hola.- Dijo el .- ¿Como estas?.-
Ella no respondió
-No estés triste pues tu peine no ha desaparecido.- En ese momento sacó algo de su bolsillo
Cuando la chica lo miro no lo podía creer Juan tenía su peine.
-¡que! ¿De verdad lo es?.-Dijo asombrada.
-Tan real como la tierra plana.- Respondió.- ¿Pero antes de darmelo dime somos novios?.
Después de un pequeño momento. ella le dijo sí y él le dio el peine.
-¿Pero como?¿de donde sacaste las llaves?.-Dijo angustiada
-Tuve que entregarle las de mi casa.- dijo el
-Tus padres no te lo perdonaran.- Dijo muy Angustiada
-Eso ya da igual.- Dijo tranquilo
Juntos volvieron a la aldea.Cuando pararon al lado de la tienda de campaña no se dieron cuenta de que a través de una cortina su padre la había visto con el peine y de la mano.
Los dos dieron un paseo por la ciudad. Hasta que cayó la noche. Cuando ella volvió a la tienda de campaña guardó su peine en el bolsillo para que no lo viera su padre. Al entrar su padre estaba de pie mirándola fijamente enfadado.
-¿Como?.- gritó su padre- ¡Como pudiste!
-¿Qu...qué?-tartamudeó
¿Donde está?- Dijo
-¿el que?.-Respondió
El padre que vio un reflejo saliendo del bolsillo de la chica. La agarro y saco el peine del bolsillo.
-¿Quién era ese?.- Dijo el
-Eso qué más da yo tengo el peine y tu una casa.- respondió
-Así no es como funciona quería darte una lección pero pare que no quieres entenderla.- se tomó una pausa y dijo- Tendré que darte otra.-
Acto seguido su padre salió de la tienda y fue probando casa a casa cuál era la que se abría con las llaves tardó varias horas en encontrar el camino que llevaba hasta la casa del chico pero el tiempo no parecía que le hubiera calmado. Cuando abrió la puerta los padres asustados se levantaron.
-¿que hace en mi casa?.- Gritó el padre
-Querrá decir en mi casa.- Dijo enseñándole la llave de la casa.- Pero sabe que le are un trato. Su hijo me a pagado con las llaves así que, le pido a él a cambio de ellas.
Los padres asombrados no se lo podían creer su propio hijo les acababa de traicionar. Pero en muy poco tiempo convirtieron la incredulidad en ira. Y antes de pensarlo bien aceptaron el trato. Cogieron a su hijo y lo ataron al mouro para que no escapara. El volvió a la zona de la aldea en la que estaba su tienda y dijo.
-Sabes é escuchado que hay un sitio muy bueno en la colina con una poza un buen lugar para pasar el rato.- Dijo sonriendo el padre
La chica los seguía de cerca pero no se atrevía a hacer nada al respecto. Cuando llegaron a la poza el padre empezó a atarlo de pies y manos y llenandole de piedras los bolsillos.
La chica gritó que no lo hiciera que solo era un peine que se lo daría si lo soltara pero el padre respondió.
-Crees que es solo por el peine. Necesitas que te den una lección, crees que puedes enamorarte de esta escoria, el no te merece, ni merece seguir viviendo.- Dijo el padre mientras se preparaba para tirar al chico a una fría muerte.
La chica le agarró en el último momento parándolo.
-Cojeme a mi pero déjale escapar a él.- Suplico
-Como te atreves.- Gritó el padre tirando a su hija de un empujón con la mano izquierda mientras agarraba al chico con la otra
-No tiene porque acabar así.- Dijo ella
-Yo elijo como acaba.- Respondió arrojando al chico al agua helada
La chica rapidamente se levanto y corrió hacia él agarrándolo de un extremo de cuerda evitando que su cabeza entrara en el agua.
-No te voy a soltar.- Dijo
En ese momento padre la empujó al agua
-Es hora de un baño.- Dijo
La moura aun aguantando la cuerda desde el agua intentó salir de la poza para elevar al chico que estaba completamente bajo el agua pero el peso de las piedras no la dejaban moverse o mantenerse a flote. Así que tomó una decisión prefería morir con su amado que vivir sin el, asi que dejo de hacer fuerza dejándose ahogar.Lo último que logro escuchar fueron las campanadas que marcaban las doce.
Pero incluso muerta nunca soltó la cuerda. Desde ese momento a las 12 de la noche se pueden escuchar sus lamentos por no haber podido salvarlo,pero en la noche de San juan celebra el cumpleaños de su amado cepillándose el pelo con el peine que un día él había recuperado.
No hay comentarios:
Publicar un comentario