domingo, 15 de abril de 2018

21. Paula.


Todos los trozos de pergamino estaban en manos de las chicas y lo único que tenían que hacer era juntarlos, consultar el mapa y el camino que formaban y posteriormente encontrar a la moura Mar, que se escondía en aquel extraño bosque.

- ¡Este va aquí! - exclama Aitana convencida.
- Que no, pesada. - le contradice Claudia.

Cuando consiguen juntar todos los pedacitos de ese complejo mapa, alucinan, al ver la cantidad de caminos que las pueden llevar hasta el lugar al que quieren llegar.

- Esto no es normal, menuda mierda, estamos aquí encerradas y ya hemos perdido la noción del tiempo, espero que encontremos de una vez a esa supuesta moura y nos lleve a casa, me duele la cabeza solo de pensarlo.

Aitana no dejaba de quejarse, mientras las demás intentaban averiguar la manera de salir de aquel espantoso bosque repleto de secretos.

Las cuatro se encaminaron hacia su destino.

Claudia y Laura iban en cabeza, con un paso constante, pero Aitana y Tania pocas ganas tenían de andar, y ya se estaban empezando a cansar cuando...

- Aaaghh!

Claudia había caído en un hoyo de más o menos 2 metros de profundidad.

- Mantened la calma, hay que intentar que salgas cuanto antes. - aclara Laura.
- Dios mío, estamos perdidas, y el hecho de pudrirme en este bosque me repugna. - dice Aitana cabreada y asqueada.

- Joder, creo que me he torcido el tobillo. - responde Claudia preocupada.

- ¡Como narices quieres que mantengamos la calma Laura! - Aitana.

La única idea sensata que se le ocurrió a Laura era callarase y pensar que hacer para sacar a su amiga de un agujero de 2 metros.

- Ya sé, necesitamos sacarla con una cuerda o liana, pero ella tiene que hacer un esfuerzo en salir de ahí, aunque le duela el pié.

- Lo haré Lau – aclara Claudia.

Tania fue a buscar una liana y una roca un poco afilada para poder cortarla.

Aitana solo intentaba “mantener la calma” , como Laura decía, aunque fuera muy complicado para ella.

Tania empezó a construír un mecanismo con una rama de un árbol y su liana.
Laura le ayudó a lanzarla al hoyo y entre las dos sacaron a Claudia fácilmente.

- ¡Claudia! ¡Pensaba que no ibas a salir nunca! - dice Aitana preocupada.

- Si, menos mal que colaboraste tanto. - replica Laura en un tono irónico.

Estaba anocheciendo

- Venga chicas, hay que ponerse en marcha, dejadme descansar esta noche el tobillo y mañana seguiremos nuestro camino.- explica Claudia cansada.

Esa noche todas durmieron bajo un gran sauce llorón cuyas hojas casi rozaban el suelo con la brisa constante que había en ese bosque, que las tranquilizaba hasta en los peores momentos de su estancia allí.

- Arriba chicas! Ya no me duele el tobillo!. - grita Claudia.

Las demás despertaron de un sobresalto.

Se pusieron en camino y después de 3 horas andando decidieron parar a comer unas manzanas que habían en una arboleda de manzanos muy próxima a ellas.

- Qué bonito sitio. - Tania.

- Y tanto que sí. - responde Laura.

- Chicas, estamos muy cerca de la cruz que marca el mapa, pero cuando digo muy cerca, es muy cerca. - dice Claudia cambiando de tema. - Solo tenemos que encontrar una cueva o una entrada a la tierra y ya estaríamos en nuestro destino.

- ¿Te refieres a esto? - dice Aitana señalando a un hoyo que se adentraba en una montaña.

- ¡Si! ¡Genial!

Todas se habían adentrado en la cueva sin ningún tipo de problema.

- No deberíamos confiarnos tanto, al fin y al cabo, estamos bajo tierra. - explica Laura preocupada.

- Tampoco tiene por qué pasar nada. - responde Aitana asegurándo que no tenían peligro.

Se empezó a escuchar un ruido retumbante y las rocas que había pegadas a esas paredes empezaron a desplomarse sin ton ni son.

La situación era aterrorizante, las niñas se habían quedado atrapadas en un espacio de cuatro metros cuadrados y necesitaban hacer algo para salir de ahí.

- Chicas, ¿Estáis bien? - pregunta Aitana, que era la única consciente.

Ninguna contestó.

- Tranquila Aitana, tranquila. - dijo para sí.

Aitana se sienta y al cabo de cinco minutos las demás se van despertando.

- ¿Donde estamos? - dice Laura sorprendida.
- Atrapadas en una cueva, por lo que veo... - responde Claudia preocupada.

Las piedras comienzan a moverse y un camino se abre entre la tierra que se anteponía a ellas y no les dejaba ver casi luz.

- No os preocupéis, niñas, estáis en buenas manos. - dice una voz clara y tranquilizante.

Acto seguido, una mujer con aspecto de ninfa, aparece de repente.

Ella era pálida, tenía los ojos azul celeste, ylos labios estrechos y rosados, además de un largo cabello blanco y una túnica dorada.

Era una mujer muy bella.

- Decidme que no estoy soñando. - dice Tania extrañada.

- ¡Claro que no! - exclama la ninfa entre risas.

- ¿Quién eres? - pregunta Claudia.

- Soy la persona que estáis buscando.

- ¡La moura Mar! - responde Laura convencida.

- Gracias a dios, nos estábamos volviendo locas buscándote. - dice Claudia sincera.

- Este es el pedazo de mapa que necesitabais. - dice la moura Mar entregándoles el objeto.

Todas menos Mar se tapan los ojos de la cantidad de luz que había nada más juntar los trozos de pergamino.

Cuando volvió la oscuridad, y las niñas abrieron los ojos, se dieron cuenta de que estaban en sus habitaciones, tumbadas en cama.

Esa noche ninguna de ellas durmió.

El día siguiente se encontraron en el colegio, como cada mañana. Y todo seguía igual que siempre.

- ¿Todo bien en casa? - pregunta Claudia impaciente por saber que les había pasado a las demás.

- Sí, todo normal, es como si no hubiera pasado nada; como si se hubiera parado el tiempo mientras estábamos en el bosque... - responde Tania.

- En mi casa también, no hay nada nuevo. - dice Aitana tranquila.

- ¿Y ahora qué hacemos? - pregunta Laura sin tener idea de como actuar.

- Seguir con nuestras vidas, y por supuesto, mantener nuestro secreto en secreto,
nunca mejor dicho. - dice Claudia, acabando con la conversación.

Sonó el timbre, entraron en clase, y fueron rehaciendo sus vidas, pero nunca sabrán cuánto tiempo, habían pasado allí y cómo narices había ocurrido aquella locura.


Es todo como el de Raúl, con la excepción de que insertamos esta viñeta:

1. Plano general de las hadas entregándoles el trozo de pergamino.
A PARTIR DE AQUÍ ES EL DE RAÚL-

RAÚL
1. Plano general de las cuatro chicas.
Claudia: ¡Tenemos todos los fragmentos, así podemos encontrar ya a la Moura Mar e irnos a clase y todos felices!
Aitana: ¡UF UF UF! ¡QUÉ NERVIOS DE VOLVER, CON LO QUE PASÓ QUIERO VOLVER YA A CASA! ¡UF UF!
Tania: ¡Tranquila mujer! Solo tenemos que ir a junto de la Moura Mar, que nos déa lo que nos tiene que dar y ya nos vamos a casa, ¿vale?
2. Plano general de las chicas.
Aitana: ¿Qué es ese ruido que suena?
Laura: No sé, será algún ruido de este bosque encantado.
Claudia: Seguro que será eso pero…
Tania: Una cosa chicas, el mapa nos indica que hay que ir por donde suena el ruido.
3. Plano medio de Aitana:
Aitana: Entonces… ¿¡SERÁ LA MOURA MAR!?
4.Plano medio de Laura.
Laura: Ostras, puede ser…
5. Plano medio de Claudia.
Claudia: Seguramente.
6. Plano medio de Tania.
Tania: Pues vamos a averiguarlo.
7. Contraplano de Claudia a plano figura de la Moura Mar peinándose.
Claudia: Vamos junto a ella.
8. Plano figura de Mar levantada.
Mar: ¿Quiénes sois? ¿A qué habéis venido?
9. Plano medio de Tania:
Tania: Solo somos unas niñas que estaban en el baño, nos metimos en el espejo por error y aparecimos en este bosque mágico. Hemos pasado una aventura muy rara con seres mitológicos.
10. Plano medio de Mar.
Mar: ¿Y en qué os puedo ayudar?
11. Plano medio de Aitana: ¡QUEREMOS VOLVER A CASA!
12. Plano medio de Mar.
Mar: Está bien. Eso es sencillo. Basta con que hagáis un collar con uno de mis cabellos.
13. Plano medio de Mar arrancándose un pelo.
13.1. Plano medio de Tania:
Tania: ¡Espera! Y a toda esa gente que hemos dicho que le ayudaríamos.
13.2. Plano medio de la Moura Mar:
Mar: No os preocupéis. Nada más fácil.
13.3. Claudia: Pero si no te hemos dicho nada…
13.4. Primer plano de Mar:
Mar: Ya os han dicho muchas veces que en este bosque se sabe todo. No os preocupéis por ellos. Los ayudaré. Podéis volver a casa en paz.
14. Plano figura de Mar poniéndoles el pelo a modo de collar.
15. Flash.
16. Plano general de las chicas en el baño.
17. Cartela sin imagen: En el mundo mágico había pasado mucho tiempo, pero en el mundo real, donde estaban todos sus amigos, solo habían pasado unos 5 minutos.

18. Cartela sin imagen: Fin.

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