Todas caminaban hacia un descampado que había en el bosque.
El siguiente ser mágico que tocaba era el Gatipedro, y Tania, extrañada, preguntó:
- Alguien sabe qué es un Gatipedro?
- No me importa quién sea, con tal de que nos lleve a casa... - dice Laura convencida.
Las demás siguieron andando hasta llegar al descampado.
- Según las instrucciones del mouro Samuel el Gatipedro debe estar por aquí. - dice Claudia.
- Buff chicas, esto se nos está haciendo infinito. - responde Tania.
- El trozo de pergamino es la misión, tenemos que concentrarnos, estar atrapadas en este bosque nos está volviendo locas. - dice Claudia convencida e intentando animar.
Las hojas caían con la brisa y las niñas se inquietaban al haberse quedado en silencio.
- ¡¡¡¡AAAHHHHHHHHHHH!!!!! - gritan al unísono.
Las cuatro empezaron a correr sin saber qué había pasado.
Decidieron dejar de correr cuando llegaron a un lugar con unas grandes rocas donde se podían esconder.
- Parece que nos ha perdido de vista, por los pelos nos atrapa. - Tania.
- Por supuesto que no os he perdido de vista, niñas... - responde el Gatipedro - Aunque mi intención tampoco era atraparos.
- ¿Qué quieres de nosostras? - pregunta Laura.
- Te equivocas, sois vosotras las que quereis algo de mí. - responde el Gatipedro creciéndose.
- El trozo de pergamino. - Claudia.
- Exacto - Gatipedro.
- Pues dánoslo, ¿No? - dice Laura sin miedo.
- Vais a tener que ganároslo niñas, si tanto deseais este trozo de pergamino tendreis que hacer una serie de pruebas para mí.
- Otro como el trasno... - protesta Laura.
- Perfecto, la primera prueba os la diré mañana y os explicaré las normas que no podéis incumplir en ningún momento.
- ¿Pero...? - dice Aitana extrañada.
El Gatipedro desaparece en un abrir y cerrar de ojos.
- ¡Ha desaparecido! - exclama Claudia.
Había anochecido y no se podía ver nada.
- Se ha hecho de noche de repente.
- Pues tendremos que irnos a dormir.
- Esto es de lo más incómodo, está lleno de piedras y tierra.
- ¡Ay! Me has pisado.
- Lo siento, es que no puedo verte ni la cara...
Ya era de día y el Gatipedro había amanecido al lado de las niñas.
- ¿Qué tal habéis dormido? - pregunta alegremente.
- Tengo la espalda destrozada, menudo sitio para dormir, lleno de rocas... - responde Claudia con máxima sinceridad.
- Bueno, la primera prueba consiste en ir al río y coger el mayor número de piedras posibles en 2 minutos de reloj; el tiempo comienza, ¡Ya!
Laura acababa de abrir los ojos.
- Pero si nos acabamos de despertar. - dice dirigiéndose al Gatipedro.
- El tiempo se acaba, más vale que te des prisa. - responde éste.
Las niñas recogieron el mayor número posible de piedras en el río y posteriormente se las entregaron al Gatipedro.
- Muy bien, ahora, tenéis 30 minutos para recoger pigmentos naturales y colorear las piedras como más os guste.
Ellas hicieron todo lo que el Gatipedro les pidió. Cuando terminaron de pintar sus piedras se las dieron a éste esperando una respuesta positiva.
- Por cierto, soy un Gatipedro y me llamo Kiralesh, ahora que ya habéis hecho todo me voy a divertir yo solita.
- ¡Me he meado! - dice Tania.
- ¡Y yo! - contestan las demás horrorizadas.
- Este es mi poder, niñas. - dice Kiralesh entre carcajadas.
Cuando el Gatipedro decide terminar con su broma, les entrega el pedazo de pergamino.
- Lo prometido es deuda, aquí tenéis.
El siguiente ser mágico que tocaba era el Gatipedro, y Tania, extrañada, preguntó:
- Alguien sabe qué es un Gatipedro?
- No me importa quién sea, con tal de que nos lleve a casa... - dice Laura convencida.
Las demás siguieron andando hasta llegar al descampado.
- Según las instrucciones del mouro Samuel el Gatipedro debe estar por aquí. - dice Claudia.
- Buff chicas, esto se nos está haciendo infinito. - responde Tania.
- El trozo de pergamino es la misión, tenemos que concentrarnos, estar atrapadas en este bosque nos está volviendo locas. - dice Claudia convencida e intentando animar.
Las hojas caían con la brisa y las niñas se inquietaban al haberse quedado en silencio.
- ¡¡¡¡AAAHHHHHHHHHHH!!!!! - gritan al unísono.
Las cuatro empezaron a correr sin saber qué había pasado.
Decidieron dejar de correr cuando llegaron a un lugar con unas grandes rocas donde se podían esconder.
- Parece que nos ha perdido de vista, por los pelos nos atrapa. - Tania.
- Por supuesto que no os he perdido de vista, niñas... - responde el Gatipedro - Aunque mi intención tampoco era atraparos.
- ¿Qué quieres de nosostras? - pregunta Laura.
- Te equivocas, sois vosotras las que quereis algo de mí. - responde el Gatipedro creciéndose.
- El trozo de pergamino. - Claudia.
- Exacto - Gatipedro.
- Pues dánoslo, ¿No? - dice Laura sin miedo.
- Vais a tener que ganároslo niñas, si tanto deseais este trozo de pergamino tendreis que hacer una serie de pruebas para mí.
- Otro como el trasno... - protesta Laura.
- Perfecto, la primera prueba os la diré mañana y os explicaré las normas que no podéis incumplir en ningún momento.
- ¿Pero...? - dice Aitana extrañada.
El Gatipedro desaparece en un abrir y cerrar de ojos.
- ¡Ha desaparecido! - exclama Claudia.
Había anochecido y no se podía ver nada.
- Se ha hecho de noche de repente.
- Pues tendremos que irnos a dormir.
- Esto es de lo más incómodo, está lleno de piedras y tierra.
- ¡Ay! Me has pisado.
- Lo siento, es que no puedo verte ni la cara...
Ya era de día y el Gatipedro había amanecido al lado de las niñas.
- ¿Qué tal habéis dormido? - pregunta alegremente.
- Tengo la espalda destrozada, menudo sitio para dormir, lleno de rocas... - responde Claudia con máxima sinceridad.
- Bueno, la primera prueba consiste en ir al río y coger el mayor número de piedras posibles en 2 minutos de reloj; el tiempo comienza, ¡Ya!
Laura acababa de abrir los ojos.
- Pero si nos acabamos de despertar. - dice dirigiéndose al Gatipedro.
- El tiempo se acaba, más vale que te des prisa. - responde éste.
Las niñas recogieron el mayor número posible de piedras en el río y posteriormente se las entregaron al Gatipedro.
- Muy bien, ahora, tenéis 30 minutos para recoger pigmentos naturales y colorear las piedras como más os guste.
Ellas hicieron todo lo que el Gatipedro les pidió. Cuando terminaron de pintar sus piedras se las dieron a éste esperando una respuesta positiva.
- Por cierto, soy un Gatipedro y me llamo Kiralesh, ahora que ya habéis hecho todo me voy a divertir yo solita.
- ¡Me he meado! - dice Tania.
- ¡Y yo! - contestan las demás horrorizadas.
- Este es mi poder, niñas. - dice Kiralesh entre carcajadas.
Cuando el Gatipedro decide terminar con su broma, les entrega el pedazo de pergamino.
- Lo prometido es deuda, aquí tenéis.
Para leer el siguiente capítulo pincha aquí.
PAULA 1
1. Plano general de las chicas caminando por el bosque.
Claudia: En el papel que nos dio el mouro Samuel dice que el siguiente ser mágico es el Gatipedro.
Tania: ¿Alguien sabe qué es un Gatipedro?
Laura: A mí me da igual quién demonios sea con tal de que nos ayude a volver a casa.
2. Plano figura de Claudia.
Claudia: Según las instrucciones del mouro Samuel debe estar por aquí.
3. Plano medio de Tania.
Tania: Esto se nos está haciendo infinito.
4. Plano medio de Claudia:
Claudia: El trozo de pergamino es la misión, tenemos que concentrarnos, estar atrapadas en este bosque nos está volviendo locas.
5. Plano detalle de las hojas.
GGGGGG
6. Plano medio de Aitana:
Aitana: ¿Qué es eso?
6. Plano general:
El Gatipedro aparece entre la maleza.
7. Plano medio de las cuatro gritando.
¡¡¡¡¡AAAHHHHH!!!!!
8. Plano figura de las cuatro corriendo.
9. Plano general de las cuatro escondidas.
10. Plano medio de Tania.
Tania: Parece que nos ha perdido de vista. Por los pelos nos atrapa.
11. Plano general de las cuatro escondidas.
Gatipedro (la voz sale desde fuera del plano): No os he perdido de vista, niñas…
12. Plano figura del Gatipedro.
Gatipedro: …aunque mi intención tampoco era atraparos.
13. Plano medio de las cuatro chicas.
Laura: ¿Qué quieres de nosotras?
14. Plano figura del Gatipedro.
Gatipedro: Más bien, sois vosotras las que queréis algo de mí.
15: Plano general de todos:
Claudia: El trozo de pergamino.
Gatipedro: Exacto.
Laura: Pues dánoslo, ¿No?
16. Plano americano del Gatipedro.
Gatipedro: Vais a tener que ganároslo. Si tanto deseáis poseer este pedacito de pergamino, tendréis que hacer una serie de pruebas y favores para mí.
17. Plano medio de Laura.
Laura: Otro como el trasno.
18. Primer plano del Gatipedro sonriendo con malicia.
Gatipedro: Perfecto, la primera prueba os la diré mañana por la mañana, y os explicaré las normas que no se pueden incumplir bajo ningún concepto.
19. Plano medio de Aitana:
Aitana: ¿Pero…?
20. Plano general de las cuatro chicas. El Gatipedro ha desaparecido.
Claudia: ¡Ha desaparecido!
21. Pantalla en negro.
Bocadillo 1: Y se ha hecho de noche de repente.
Bocadillo 2: Pues tendremos que echarnos a dormir.
Bocadillo 3: Esto es incomodísimo. Está lleno de piedras.
Bocadillo 4: ¡Ay! Me has pisado.
Bocadillo 5: Lo siento, es que no se ve nada.
22. Plano general de las chicas durmiendo y el Gatipedro en el medio.
Gatipedro: ¿Qué tal habéis dormido chicas?
23. Plano figura de Claudia llevándose la mano a los riñones.
Claudia: Tengo la espalda destrozada. Esto está lleno de piedras.
24. Plano medio del Gatipedro.
Gatipedro: Está bien, la primera prueba consiste en ir al río y coger el mayor número de piedras posibles en 2 minutos de reloj, a poder ser redondas y lisas, si no os costará lo siguiente que tendréis que hacer sobre ellas… El tiempo comienza, ¡ya!.
25. Plano medio de Laura.
Laura: Pero si nos acabamos de despertar.
26. Primer plano del Gatipedro.
Gatipedro: Se os acaba el tiempo.
27. Plano general de las chicas recogiendo piedras en el río.
Laura: Es increíble tener que hacer esto recién levantada.
Claudia: Calla. Yo quiero volver a casa. Y si tengo que comer piedras, lo haré.
28. Plano general de las chicas dándole las piedras al Gatipedro.
Gatipedro: or cierto, soy un Gatipedro, y me llamo Kiralesh. Dejadme ver, ¿Cuántas tenéis?
29. Plano medio del Gatipedro:
Gatipedro: Perfecto. Ahora tenéis que encontrar pigmentos para pintarlas del color que más os guste.
30. Plano medio de Aitana:
Aitana: ¿Cuánto tiempo tenemos?
31. Primer plano del Gatipedro.
Gatipedro: Treinta minutos.
32. Plano general de las chicas cogiendo pigmentos.
33. Plano figura de las chicas pintando las piedras.
34. Plano figura del Gatipedro.
Gatipedro: Muy bien chicas, por último, me voy a divertir un rato, pero yo solita.
35. Plano figura de las cuatro chicas.
Tania: ¡Me he meado!
Aitana: ¡Y yo!
Claudia: ¡Y yo!
Laura: ¡Y yo!
35. Plano medio del Gatipedro.
Gatipedro: ¿Es que no conocéis el poder del Gatipedro?
36. Plano medio de las chicas.
Tania: ¿Cuál? ¿Hacer que la gente se mee encima?
36. Primer plano del Gatipedro.
Gatipedro: Eso mismo.
37. Plano figura de todos. El Gatipedro les da le pergamino.
Gatipedro: Ahí tenéis el pergamino. Lo prometido es deuda.
No hay comentarios:
Publicar un comentario